22 de febrero de 2007

La Araña


Me temen...

y yo no soy malo,

sólo me hago temer.


Me alaban...

los que realmente me conocen

y no se fijan sólo en mi apariencia.


Me abrazan...

los que no pueden caer

envenenados por mis mordiscos.


Me acompañan...

los que no son ni más grandes

ni más pequeños que yo.


Me miran...

los que realmente no saben como soy

y buscan algo más.


Me evitan...

todos aquellos que pueden caer en mis redes

y los que no me pueden alcanzar.


Me quieren...

los que tienen que quererme,

ni uno más.

21 de febrero de 2007

Masaje en una botella

Ese masaje llegará
en una botella lisa
que como manos en brisa
por tu cuerpo redimirá.

Y esos besos bendecidos
en tus labios sellarán
una trama o una más
de lazos engrandecidos.

Y la botella se abrirá
para dejar paso al mar
de risueñas termitas blancas
que en tu piel sucumbirán.

Ese masaje llegará
en una botella ondulada
que como manos sagradas
tus huesos hará vibrar.

8 de febrero de 2007

Nuestra burbuja


Creamos un mundo aparte del que podremos partir ilesos,
El día a día nos une nos entremezcla los huesos.
Y las sombras ya son una, una unión en un espejo.
Tu contorno y tu sonrisa un panal de rico sexo.
Hemos creado una burbuja y ¡ya no puedo escapar de tus besos!

7 de febrero de 2007

Leguas ancianas

Legua de camino pedregoso
es la espera.

Ancianos que esperan
su final deseado en plana carretera.

Luna que mengua,
salitre en la piel.

Llega tu lengua
a esta última legua,
tu perfume se pierde
en la niebla de miel.

Melodía de esencias
panal de hiel,
gris demencia
tu lengua en mi sien
legua de lenguas
que arrebatan mi bien.

5 de febrero de 2007

Mi amigo

Tú eres mi amigo.
Me buscas cuando necesitas hablar para desahogarte.
Me necesitas cuando las cxircustancias se tuercen, o cuando la providencia nos brinda ilusiones.
Y siempre estás ahí.

Me busques o no, siempre me encuentras.
En tus días, en tus ratos, tienes un pedazo de mí.

Contigo he vivido muy buenos momentos y he llorado en tu hombro cuando las cosas no han ido bien.

Tú has reído conmigo y hemos labrado juntos un camino en el silencio cuando las cosas se ponían tan tercas que no daba para hablar sobre las penas.

Al igual que tú haces, yo te busco cuando necesito unas palabras de aliento.
Y te encuentro allá donde estés.
A pesar de las distancias, a pesar de los horarios, a pesar de las circunstancias, siempre hemos estado, estamos y estaremos juntos, a nuestro modo y de nuestra forma.

Te quiero y sé que tú sí eres mi amigo.
Y yo el tuyo.
Ánimo.